Argentina tiene evidentes problemas de competitividad en sus sectores productivos que
limitan su desarrollo. No solo necesita promover una agenda prioritaria de cooperación
entre el sector público y el privado, sino también, en primera instancia, debe dejar de
incurrir en malas decisiones que la afectan negativamente. Esto incluye desde impuestos
distorsivos, burocracia redundante, déficit de infraestructura o problemas de coordinación
entre los distintos niveles gubernamentales.
Desde Sistémica entendemos que el Estado no debe ser un socio no deseado, una carga
con excesivas regulaciones para las empresas pero tampoco dejar librado todo al juego
libre del mercado. Necesitamos un Estado inteligente que entienda las necesidades de los
sectores productivos, y las articule en un programa de desarrollo, facilitando y promoviendo
a través de sus políticas públicas la inversión y los negocios.
En esta oportunidad el asesor de empresas Hugo Carassai analizará un tema gravitante
como los bienes de capital desde dos problemáticas que se han vuelto en contra de la
competitividad empresarial: El saldo de IVA técnico y la complejidad que tienen los bonos
de bienes de capital para su cobro en tiempo y forma.